miércoles, 6 de septiembre de 2023

Poema 427. Naranja.

Ellen Kennedy. Boston, 1989.


NARANJA


quisiera que mi vida consistiese únicamente

en conducir mi bicicleta contigo

montaña abajo sin parar

mientras escuchamos música

en medio de la nada

sin nadie alrededor

excepto unas pocas luces parpadeantes y tranquilas sobre el cielo

parecidas a las estrellas pero más brillantes

y más naranjas

Poema 426. Larutan.

Washington Berón, Puerto Madryn, 1961.


Larutan


Me siento a meditar.

Debajo mío el pasto

se aprieta verde vivo.

Tomo una brizna y la llevo a la boca

y en ese sabor estaba el mundo.

domingo, 3 de septiembre de 2023

Poema 425. Tanto desear, septiembre...

Baldomero Fernández Moreno. Buenos Aires, 1886-1950.


¡Tanto desear, septiembre, tu llegada!

¡Suspirar tanto por la primavera!


Heme aquí, boca arriba, 

sobre la fina y perfumada hierba

viendo pasar las grandes nubes blancas

las manos en la nuca y cruzadas las piernas.


El sol me está quemando poco a poco

y la humedad del campo me penetra...

Yo quisiera moverme y no me muevo,

no siento el corazón ni la cabeza.

Me voy a evaporar como un arroyo

o voy a echar raíces en la tierra..

Poema 424. Son estas frágiles ceremonias...

Pablo Bellido, Comodoro Rivadavia, 1978.                                                                                                        

Son estas frágiles ceremonias para el sentido,

ahora lo sé:

el oficio de los vínculos,

la llave que guarda mi muerte

Ahora lo sé:

Estos poemas son para cuidar de mí mismo.

Poema 423. Amor de mis entrañas, viva muerte...

Federico García Lorca. Fuente Vaqueros, 1898 - Granada, 1936.


Amor de mis entrañas, viva muerte…


Amor de mis entrañas, viva muerte,

en vano espero tu palabra escrita

y pienso, con la flor que se marchita,

que si vivo sin mí quiero perderte.


El aire es inmortal. La piedra inerte

ni conoce la sombra ni la evita.

Corazón interior no necesita

la miel helada que la luna vierte.


Pero yo te sufrí. Rasgué mis venas,

tigre y paloma, sobre tu cintura

en duelo de mordiscos y azucenas.

Llena pues de palabras mi locura


o déjame vivir en mi serena

noche del alma para siempre oscura.

Poema 422. 52.

Safo. Mitilene, Lesbos 650-610 a.C - Léucade 580 a. C.


52


ni se me ocurre tocar el cielo con las manos

Poema 421. Decálogo del 10 de agosto.

Daniela Mishima. Quilmes, 1979.


DECÁLOGO del 10 de agosto 


1. Cuando pensás que el problema está resuelto es cuando más se volvió irresoluble.

2. Adentro tuyo alguien busca pruebas de tu indignidad. Decile que pare.

3. Podés hacer algo memorable para un perro, para una planta recién regada.

4. Ponete en un punto de vos donde haya silencio, hacele compañía a cada gota de tu sangre.

5. Hoy tampoco tuviste  cáncer y ayer no te caíste por las escaleras.

6. Cuando el otro es una aguja no le digas que sos un globo.

7. Contá hasta 10 antes de pensar.

8. Pasan cosas increíblemente feas y otras increíblemente lindas también cuando no pasa nada.

9. Hay en el fondo de vos un granito de polvo que sólo vos podes alcanzar. Ese es tu nombre.

10. Rezá mucho durante el día. Mientras escribís, lees, cuando mirás, cuando tratás de dormir.

Tu fuerza son esas oraciones que no tienen Dios, hay que rezar hasta que todo sea una sola oración, incluso cuando te desvestís, tomas un café,  bajás de un tren.

Poema 420. Escribir amor.

Devorah Major. EE.UU., 1952.


ESCRIBIR AMOR


todo lo que quiero escribir son poemas de amor


en esta temporada de carne podrida

y vientres huecos

en este año de cadáveres ocultos

y cementerios de metralla


todo lo que quiero escribir son poemas de amor

para aquel cuyo aliento

se mezcla con el mío


para los labios que pruebo

para las caderas que rodeo

para la savia que comparto


todo lo que quiero escribir son poemas de amor


sobre ojos que brillan

y perfume de sudor

sobre promesas hechas y cumplidas

sobre secretos y miedos

compartidos y revelados


en este año de la ciudad enterrada

en esta década del hambre cosechada

en este siglo ya recién comenzado 

con miles sobre miles

de miembros desgarrados

ojos quemados

corazones destripados


todo lo que quiero escribir son poemas de amor

no quiero esta tarea de

documentar la desesperación infantil

el duelo de las madres la miseria

de los padres el maltrato de los hijos

las tormentas e incendios del planeta


todo es demasiado para mí

mis ojos se llenan de sal y se nublan

y solo los poemas de amor lo harán mejor

despejarán el camino


pero todos alrededor mío

esos otros que amo

a los que conozco y a los extraños

que están siendo asesinados o esclavizados

dejados morir de hambre o torturados

apresados o abandonados


y los poemas que quiero escribir

me evaden hasta que me voy

sin nada más que este aullido

atrapado entre mis dientes


todo lo que quiero escribir son poemas de amor


sobre el azul besando mi mañana

tarta de limón y sabores frescos

en mis tardes, lunas crecientes

arqueadas, lejos del brillo de Venus

en un cielo hambriento de estrellas


todo lo que quiero escribir 

son poemas de amor


todo lo que quiero escribir

es amor

Poema 419. El relámpago no maneja...

Martín Gambarotta. Buenos Aires, 1968.


El relámpago no maneja

 su forma, la forma

del relámpago se crea

a partir de su incapacidad de tener

forma. La forma

del relámpago

es su no forma.

El relámpago vacía el molde

de su forma, la velocidad

del relámpago le gana a la forma.